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El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid aprobó en su última reunión la propuesta de adjudicación del contrato de acogimiento residencial especializado para menores tutelados con trastorno del comportamiento. El acuerdo supone una inversión de 14.678.713 euros para el mantenimiento de 50 plazas durante un plazo de cuatro años, lo que implica un incremento del 23% en su presupuesto.
Así lo anunció este sábado el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso en un comunicado en el que precisó que los usuarios del centro, el único con estas características de la Red de Protección de la Comunidad de Madrid, son menores de entre 12 y 17 años con conductas de “alto riesgo social que alteran de forma grave sus pautas de convivencia y comportamiento”, con trastorno disocial «grave y recurrente» o que precisen programas educativos y terapéuticos “específicos” para “controlar su conducta y emociones”.
En concreto, este recurso les proporciona una atención integral estructurada en tres fases, como son la acogida y adaptación inicial, integración y preparación para su salida a otros centros, a su familia o a la vida autónoma, y que incluye cuidado personal, control y protección, atención educativa, rehabilitadora, terapéutica y social y otros servicios complementarios de ocio, talleres formativos o alternativas de empleo.
El precio del contrato ha aumentado respecto al vigente hasta ahora para la incorporación de nueve profesionales, que se unen a los 79 que ya trabajan en el centro, lo que supone un incremento del 11% en la plantilla, y la puesta en marcha de un nuevo servicio de atención ambulatoria.
El programa está orientado a menores que, tras pasar por las instalaciones, se hayan incorporado al domicilio familiar, y les proporciona seguimiento y apoyo en su proceso de adaptación.
