ESCUCHA MADRID
La Federación de Asociaciones de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de la Comunidad de Madrid (FAMMA Cocemfe Madrid) denuncia que la empresa Interbus, que se encarga de realizar un servicio de transporte público en el municipio Alcobendas, no cumple con las medidas de mantenimiento de las rampas en sus autobuses y provoca el rechazo y la exclusión de personas con discapacidad o con movilidad reducida.
La reiteración de esta actitud, en la que no pone medidas la empresa, está generando una discriminación a una parte importante de la población de Alcobendas, lo que debería estar perseguido y castigado por el Consorcio Regional de Transportes de la Comunidad de Madrid.
En la Comunidad de Madrid hay más de 220.000 personas con un tipo de discapacidad física, pero, no solamente tenemos que ceñirnos a esta parte de la población, sino también a cualquiera que tenga problemas de movilidad reducida por lo que, las dimensiones de esta insolidaria actitud, alcanzan una dimensión mayor.
A FAMMA han llegado varios testimonios de usuarios, que han realizado algún trayecto con los autobuses de la compañía y han manifestado que las rampas no funcionaban, continuando el trayecto dicho autobús y dejándoles abandonados en la propia parada.
Cuando se dan estas circunstancias, los protocolos de actuación de las compañías deben aplicarse retirando el vehículo de la circulación y remitiéndolo a cocheras para rectificar dicha avería. Esto se cumple sistemáticamente por Interbus.
Con eso, Interbus solo demuestra una gran dejación de sus funciones y no estar preparados para ofrecer un servicio a los usuarios. Por no decir del aislamiento que, con este tipo de comportamiento, demuestra hacia las personas con discapacidad o movilidad reducida.
Por otro lado, la federación ha reclamado al Consorcio de Transportes de la Comunidad de Madrid un mayor compromiso y control con aquellas empresas que designan para hacer este servicio de transporte público.
FAMMA puntualiza:
- La empresa Interbus permite que sus vehículos salgan a funcionar sin que las rampas se encuentren en perfecto estado de funcionamiento. Lo que excluye a las personas con movilidad reducida el uso de este tipo de transportes.
- En los protocolos de intervención, la empresa debería devolver los vehículos a cocheras para reparar las rampas que están en mal funcionamiento, pero hace todo lo contrario y los vehículos siguen funcionando rechazando el servicio a personas con discapacidad.
- FAMMA pide al Consorcio Regional de Transportes, que sancione a Interbus por su pasividad y reiterados incumplimientos.
- Según traslada el Consorcio Regional de Transportes, la compañía ha sido advertida en múltiples ocasiones de sus infracciones, sin embargo, el organismo público no reacciona sancionando a la empresa.
- A la Federación le consta las múltiples quejas de usuarios que no pueden realizar su vida con normalidad por la incertidumbre que genera que los vehículos no presten adecuadamente el servicio de transporte.
