SERVIMEDIA
La Coordinadora Estatal de VIH y Sida en España (Cesida) presentó este miércoles en el pregón del Orgullo Lgtbi de Madrid el primer Pride+ de la historia en España, que pretende “visibilizar” la realidad, en muchas ocasiones estigmatizada, que viven las más de 150.000 personas con el VIH en España así como reclamar su “dignidad”. Además, reivindicó la herramienta “imprescindible” que supone la llamada ‘Ley Zerolo’ contra la discriminación al colectivo.
A este respecto, la presidenta de Cesida, Reyes Velayos, subrayó que, tras 40 años desde que se produjo el primer diagnóstico de VIH, “el estigma y la discriminación siguen presentes” en la vida de estas personas.
“Necesitamos que se dejen de vulnerar derechos y necesitamos trabajar contra el estigma y la discriminación. Pero, sobre todo, necesitamos ser visibles”, abundó, para justificar el lanzamiento de esta iniciativa en el marco del Orgullo Lgtbi de Madrid, un “movimiento”, dijo, “al que tantas conquistas en derechos debemos y en un espacio perfecto para visibilizar los retos pendientes, como la salud sexual”.
A este respecto, el secretario general de Cesida, Ramón Espacio, puntualizó que vivir con VIH “no es, per se, un rasgo identitario”. “No es algo de lo que te puedas sentir o dejar de sentir orgulloso”, agregó, para señalar que, sin embargo, en el colectivo se sienten “orgullosas” por la “aportación” que las personas con el VIH han realizado “a la respuesta global a esta pandemia y de las conquistas en igualdad, dignidad y derechos de las poblaciones vulnerables”.
La presentación de la iniciativa corrió a cargo del director de Cesida y activista Lgtbi, Toni Poveda, y del activista VIH+ y coordinador de gTt-VIH, José Fley.
Poveda afirmó desde el escenario del pregón del Orgullo que los integrantes del colectivo se pueden “sentir orgullosos de la importancia que ha tenido la lucha de las personas con VIH en la consecución de derechos”. “Por eso, decimos alto y claro, VIHsibilidad es igual a dignidad”, apostilló.
Tras congratularse de estar “de celebración en la emblemática plaza de Pedro Zerolo, un activista del VIH y Lgtbi”, que ha dado nombre a la ‘Ley Zerolo”, aprobada este 30 de junio en el Congreso, Poveda defendió que la norma es “un instrumento imprescindible para luchar contra la discriminación y cumplir el principio de igualdad de forma amplia e integral, ya que es la primera ley que recoge la discriminación por estado serológico».
Junto con otras entidades pertenecientes a la Alianza por la ley de Igualdad de Trato, como Felgtb, Fundación Secretariado Gitano o Red Acoge, Cesida ha trabajado durante años en la elaboración y aprobación de esta ley destinada a “fortalecer el derecho antidiscriminatorio español” persiguiendo y sancionando aquellos actos de discriminación que, por no tener suficiente entidad penal, quedaban impunes.
Por su parte, Fley subrayó que “muchas personas con el VIH” sufren o han sufrido “diariamente discriminación” en su vida, “en el trabajo, en la sanidad, en las familias y círculos más cercanos”.
“Si discriminar nunca tuvo sentido, con los avances científicos que han conseguido que las personas que tomamos la medicación tengamos el virus indetectable y, por lo tanto, no lo podamos transmitir, tiene menos sentido todavía”, aseveró, para explicar que, con el Pride+, los organizadores pretenden “poner a las personas con el VIH en el lugar en el que siempre debieron estar, en igualdad con el resto de la ciudadanía, disfrutando de los mismos derechos que cualquier persona en esta sociedad”.
PRIDE+
El arranque de esta campaña está protagonizado por cuatro personas con el VIH, que comparten la liberación que ha supuesto poder decir públicamente que tienen VIH. Una de ellas es Irene, de 25 años, para quien “haber vivido en el armario del VIH ha sido la peor etapa” de su vida, dado que “nunca había experimentado tanta soledad, tanto miedo al rechazo” por parte de su familia o amigos.
Otra de estas personas es Kike Poveda, de 62 años, un superviviente del VIH, para quien “ser visible” le “sirvió” para reconciliarse con él mismo.
El Pride+ cuenta con una agenda de actividades culturales, formativas y deportivas y propone el despliegue de una serie de acciones públicas para “llamar la atención” sobre la “persistencia del estigma y la discriminación” asociada al VIH tras “más de cuarenta años de pandemia” y para “poner en valor 40 años de activismo y resiliencia”.
Su programación se articula en torno a los ejes de acción cultural, deportivo, formativo y reivindicativo, siendo este último el “eje transversal que lo vertebra y dota de sentido”, y todas las actividades se efectuarán durante el otoño en Madrid, coincidiendo con el 20 aniversario de la fundación de Cesida, entidad promotora del proyecto.
La acción con la que culminará el Pride+ será una manifestación por el centro de Madrid el 19 de noviembre, que se concibe como “una suerte de salida del armario masiva” de las personas con el VIH y una “oportunidad de solidarizarse con el colectivo para los distintos agentes sociales, políticos, civiles y culturales”.
El proyecto cuenta con el apoyo del Ministerio de Sanidad, el Ministerio de Cultura y Deporte, Gilead, Janssen y Viiv Healthcare.