ESCUCHA MADRID / ALCORCÓN
1ª. En el marco de las políticas generales del programa electoral de su partido, ¿cuáles considera que son los puntos más importantes por los que hay que ponerse a trabajar en beneficio de su municipio?
La próxima legislatura tendrá dos retos fundamentales: dar una respuesta al problema de la vivienda y adaptar nuestra ciudad frente a la emergencia climática.
Para el primero de ellos, hemos elaborado un ambicioso plan de vivienda que presentaremos muy pronto. El mismo estará centrado en ofrecer alquileres asequibles, con el objetivo de que nuestras vecinas y vecinos puedan quedarse aquí a desarrollar su vida y tengan alternativas ante la especulación que impera en el sector.
Somos conscientes de que un Ayuntamiento tiene una capacidad de acción limitada, pero llegaremos hasta donde seamos capaces y seguiremos pidiendo la cooperación activa y leal del resto de administraciones.
Para el segundo, queremos abordar una transformación integral de la ciudad para convertirla en un Hogar Climático. Aunque esta transformación debe darse a medio y largo plazo, queremos responder con un plan de acción en el que plantemos árboles en un 30% de la superficie urbana e instalemos parques de agua en todos los barrios para refrescarse frente al calor.
Estas medidas, junto a otras como la instalación de bancos en toda la ciudad, fuentes para beber agua o la puesta en marcha de un plan de sombras, reivindican el disfrute de la ciudad en un contexto de emergencia climática.
2ª. En el ámbito de las políticas sociales, exponga los aspectos más urgentes que la población de su municipio está reclamando y desarrolle el abordaje de sus soluciones.
Actualmente, además de la vivienda, creo que ha sido evidente que tenemos un problema de fondo con las desigualdades que genera nuestro actual sistema energético, con facturas que, en ocasiones, desestabilizan la economía familiar.
Frente a esta situación, nos preocupa especialmente que haya gente que se quede fuera de la transición energética.
Para combatir esto, tres ejes de actuación:
En primer lugar, continuar con las ayudas para instalar energía solar fotovoltaica, con subvenciones de hasta un 100% para familias vulnerables. Es el momento de apoyar este cambio que, en ocasiones, puede generar ahorros de hasta un 85% en la factura de la luz.
En segundo lugar, constituyendo comunidades energéticas locales que nos permitan producir y consumir renovables de manera alternativa al mercado eléctrico convencional. Ya hemos creado la primera comunidad energética de carácter industrial en Urtinsa, una primera experiencia que pilota la empresa pública, ESMASA, junto a otras empresas del polígono y que esperamos trasladar al ámbito privado.
En tercer lugar, instalando el 100% de alumbrado a LED para ganar en seguridad, sostenibilidad y ahorro de la factura pública de la luz. Este cambio lo disfruta toda la ciudad y tiene un efecto positivo, pues libera recursos municipales que van a pagar la electricidad a otras necesidades de la ciudad.
Muchas veces, la política social de respuesta inmediata tiene como mejor respaldo medidas que operen directamente en las causas de la desigualdad. Dicho de otra manera, no se trata sólo de ayudar a quien no puede pagar la factura de la luz (que también), sino de sentar las condiciones para bajarla y, así, suponga un problema para menos gente. Nos movemos por esa senda que es más larga y trabajosa, pero que cuando logra resultados suelen tener una mayor capacidad de perdurar en el tiempo.
3ª. ¿Qué le exige su política municipal a la del Gobierno de la Comunidad de Madrid?
Que cumpla con su parte y que sea leal.
El Gobierno autonómico tiene pendientes numerosas inversiones del Plan PIR. Cuando se habla de cifras se despersonalizan las cosas, por eso creo que es importante que los vecinos sepan que se tratan de luces LED sin cambiar, pistas deportivas sin reparar o espacios públicos pendientes de alguna reforma.
A mi lo que me gustaría es que, independientemente de quién gobierne en cada administración, alcancemos todos el compromiso de cooperar por objetivos comunes.
Creo que hay gente buena en todos sitios que está dispuesto a hacerlo.
Desde la evidente diferencia, yo le agradecí a Paloma Martín, Consejera de Medioambiente de la Comunidad de Madrid, todo lo que nos ayudó para optar fondos que europeos para financiar una planta de tratamiento del residuo orgánico en nuestro municipio.
Nosotros teníamos un buen proyecto y, tanto ella como su equipo, pusieron todas las facilidades para ayudarnos a sacarlo adelante. Podía habérmelo callado, pero creo que hay que defender un modelo de cooperación entre instituciones desde la diferencia política.
Así es cómo debe funcionar. Cada uno tiene la legitimidad democrática para defender su modelo, pero tiene la obligación constitucional de trabajar por la ciudadanía. Si avanzáramos hacia ese modelo, creo que nos iría mejor.
